29/11/2021
La historia de la cartografía y la representación del entorno es maravilloso, llena de descubrimientos, innovaciones y la constante búsqueda del conocimiento geográfico. En este contexto, el Imago Mundi, una tablilla de arcilla babilónica de hace aproximadamente 000 años, emerge como un testimonio excepcional de la concepción del entorno en la antigüedad. Este antiguo mapamundi, encontrado en Sippar (actual Irak) y resguardado en el British Museum, no solo representa una visión geográfica única, sino que también ilustra la estrecha relación entre la cartografía, la cosmovisión y la transmisión de conocimientos a través de la escritura cuneiforme.
Descubrimiento e Interpretación del Imago Mundi
Descubierto por el arqueólogo Hormuzd Rassam en 1882, el Imago Mundi ha cautivado a los investigadores por más de un siglo. La escritura cuneiforme en ambas caras de la tablilla ha sido objeto de un minucioso análisis. El curador Irving Finkel ha destacado que la escritura describe las creencias y la cultura de los antiguos babilonios, ofreciendo una valiosa información sobre su cosmovisión. La cara principal presenta una especie de mapa que ofrece una vista aérea de Mesopotamia, rodeada por un doble círculo etiquetado como el " Río Amargo ", considerado en ese entonces como el límite del entorno conocido. Dentro de este círculo, se distinguen con precisión el río Éufrates, Babilonia y otras características geográficas. Según Finkel, este diagrama circular “captura la totalidad del entorno conocido, donde la gente vivía, prosperaba y perece”.
En el exterior del doble anillo, aparecen triángulos que representan montañas y reinos distantes, más allá del entorno conocido, lugares donde la realidad se mezcla con la imaginación. La escritura cuneiforme en la parte posterior de la tablilla nos da más información sobre estos ocho triángulos situados fuera del círculo y nos tutorial hacia tierras desconocidas, relatando historias de aves gigantes y árboles con joyas en lugar de frutas, lo que sugiere una mezcla de realidad y mitología en la percepción geográfica de los antiguos babilonios.
El Arca de Noé y el Imago Mundi
Una de las historias más maravillosos relacionadas con la parte posterior de la tablilla tiene una notable similitud con el relato bíblico del Arca de Noé. El texto menciona que el explorador debe atravesar "siete leguas... [para] ver algo tan grueso como un barco parsiktu". La palabra "parsiktu" ha llamado especialmente la atención de Finkel, ya que aparece solo en otra tablilla cuneiforme que describe un arca construida por la versión babilónica de Noé. Esta arca, según la leyenda, finalmente se estrella en la otra vertiente de una montaña más allá del Río Amargo.
Para Finkel, el Imago Mundi no solo es un mapa, sino una aventureros que buscan el Arca de Noé, proporcionándonos una valiosa comprensión de la interacción entre historias y culturas antiguas. Señala que desde la perspectiva babilónica, la existencia del Arca era un hecho, y que este mapa indicaba la ruta para encontrar sus restos.
La Evolución de la Cartografía: Del Imago Mundi a la Imprenta
El Imago Mundi representa un hito en la historia de la cartografía, marcando el comienzo de la representación científica del entorno. Si bien los primeros mapas eran representaciones rudimentarias en la arena o la nieve, los mapas babilónicos, como el Imago Mundi, muestran un progreso significativo en la precisión y la intención de representar el entorno conocido. Posteriormente, los griegos, con figuras como Tales de Mileto, Aristóteles, Hiparco y Eratóstenes, hicieron importantes contribuciones a la cartografía, introduciendo fundamentos matemáticos y una comprensión más precisa de la forma esférica de la Tierra. Ptolomeo, en el siglo II d.C., recopiló los conocimientos cartográficos de su época, creando un panorama completo del progreso en la materia, que influyó de manera decisiva en la cartografía de siglos posteriores.
Durante la Edad Media, la cartografía se estancó en algunas regiones, pero el desarrollo de los portulanos, mapas diseñados para la navegación marítima, revitalizó la disciplina, utilizando la brújula como herramienta fundamental. Los viajes de exploración, especialmente durante la era de los descubrimientos, generaron una avalancha de nueva información geográfica, lo que impulsó la creación de mapas más precisos y detallados. La llegada de la imprenta a finales del siglo XV tuvo un profundo impacto en la difusión de mapas. Obras como el Theatrum Orbis Terrarumde Abraham Ortelius, el primer atlas moderno, se beneficiaron enormemente de la capacidad de la imprenta para reproducir y distribuir mapas a gran escala, aumentando significativamente el conocimiento geográfico a nivel mundial.
La proyección de Mercator, desarrollada por Gerhardus Mercator en 1569, representó una innovación crucial en la cartografía, al permitir una representación precisa de las rutas marítimas. Esta proyección, aunque con sus limitaciones, se convirtió en un estándar para la navegación marítima durante siglos. La cartografía continuó evolucionando con avances en la tecnología y la exploración, incluyendo el desarrollo de la fotografía aérea y la cartografía satelital, que han proporcionado métodos cada vez más precisos para representar la superficie terrestre.
La Importancia del Imago Mundi en la Historia de los Mapas y la Imprenta
El Imago Mundi ocupa un lugar destacado en la historia de los mapas y la imprenta porque representa el inicio de un proceso de desarrollo constante en la representación cartográfica. La tablilla muestra una profunda conexión entre la cartografía y la transmisión de conocimientos a través de la escritura. La evolución de la cartografía, desde las representaciones rudimentarias hasta los mapas detallados y precisos de la era moderna, está indisolublemente ligada a los avances tecnológicos, las exploraciones geográficas y la capacidad de reproducir y distribuir información cartográfica. La imprenta jugó un papel crucial en la expansión del conocimiento geográfico, al permitir la producción masiva de mapas y atlantes. En el Imago Mundi podemos ver un ejemplo temprano de la relación entre mapa, conocimiento y cultura, sentando las bases para los elaborados mapas y atlas que se producirían siglos después con la ayuda de la imprenta.
La comparación entre el Imago Mundi y mapas posteriores ilustra la evolución de la precisión cartográfica, la escala, la proyección y la incorporación de información diversa. Si bien el Imago Mundi presenta una visión subjetiva y limitada del entorno, centrada en Mesopotamia, los mapas posteriores, beneficiados por los avances tecnológicos y la acumulación de información, ofrecen representaciones cada vez más completas y precisas de la superficie terrestre. La evolución de la cartografía no solo refleja los avances tecnológicos, sino también el creciente conocimiento y comprensión del entorno por parte de la humanidad.
Tabla Comparativa: Imago Mundi vs. Mapas Modernos
| Característica | Imago Mundi | Mapas Modernos |
|---|---|---|
| Época | Siglo VI a.C. | Siglo XXI |
| Material | Tablilla de arcilla | Digital, papel |
| Técnica | Grabado, escritura cuneiforme | Impresión digital, GPS, imágenes satelitales |
| Precisión | Esquemática, simbólica | Alta precisión, escala variable |
| Proyección | Sin proyección sistemática | Diversas proyecciones, según la aplicación |
| Información | Cosmovisión, geografía local, mitología | Diversos datos: topografía, clima, demografía, etc. |
| Escala | Local, limitada | Variable, desde local hasta global |
El estudio del Imago Mundi nos ofrece una valiosa ventana al pasado, permitiéndonos comprender cómo se concebía el entorno en la antigüedad. Su simpleza y la riqueza de su información, combinadas con el impacto posterior de la imprenta en la difusión de los mapas, nos recuerdan la importancia de la cartografía como herramienta fundamental para entender nuestro planeta y su historia.