01/03/2017
En la actualidad, es muy común que las tarjetas gráficas compartan memoria RAM. Pero, ¿qué hace exactamente esta memoria? ¿Cuál es el requisito básico para tener memoria GPU compartida? Si tienes una computadora con una GPU integrada o dedicada, el sistema reserva una parte de tu RAM para la GPU. La GPU es uno de los componentes que más consume RAM, después de la CPU, ya que se encarga de procesar gráficos para software y aplicaciones como el modelado y renderizado 3D, que utilizan imágenes y videos de alta resolución.
![Cómo asignar mas memoria a la grafica integrada [TUTORIAL]](https://i.ytimg.com/vi/tK0Y3osFa_U/hqdefault.jpg)
¿Qué es la memoria GPU compartida?
Cada GPU tiene una memoria de video dedicada que permite que el software gráfico funcione eficientemente. Esta memoria está físicamente en la tarjeta gráfica. Sin embargo, a veces esta memoria no es suficiente, lo que puede provocar fallos, retrasos o que la aplicación no funcione correctamente. En estos casos, la memoria GPU compartida proporciona almacenamiento adicional para la tarjeta gráfica. En términos sencillos, es una RAM virtual reservada de la RAM del ordenador. Solo se utiliza cuando la GPU la necesita. También se conoce como VRAM (Video RAM) y se utiliza cuando se agota la memoria GPU dedicada.
¿Cómo funciona la memoria GPU compartida?
La GPU tiene su propia memoria de video para procesar tareas. A diferencia de la CPU, la GPU realiza varias tareas de procesamiento gráfico simultáneamente. Un solo ciclo de renderizado incluye el procesamiento de múltiples elementos de iluminación, sombreado y mejora de texturas. Al igual que cualquier otro proceso, estos requieren almacenamiento para almacenar los archivos necesarios durante la ejecución. A menudo, la memoria de video dedicada no es suficiente para todas estas tareas, y aquí es donde entra en juego la memoria GPU compartida.
La memoria GPU compartida es una memoria compartida virtual que permite a la GPU almacenar datos de procesamiento adicionales para mantener un funcionamiento fluido y crear una canalización adecuada de tareas. A diferencia de la memoria de video de la GPU, no está físicamente disponible, sino que es memoria asignada de la RAM. Un usuario puede utilizar hasta el 50% de la RAM del sistema como memoria GPU compartida, independientemente de si se trata de una GPU compartida o integrada.
Diferencias entre memoria compartida y dedicada
La principal diferencia entre la memoria compartida y la dedicada radica en su velocidad de procesamiento. La memoria dedicada está montada directamente en la GPU, tiene conexiones muy cercanas a su núcleo de procesamiento y forma parte de los módulos de la GPU, lo que la convierte en una memoria de procesamiento muy rápida. La memoria compartida es una partición de la RAM que se conecta a la GPU mediante conectores PCIe, lo que afecta al rendimiento de la GPU.
Cuando se utiliza memoria GPU compartida, se desconecta hasta el 50% del almacenamiento de RAM de otras tareas, lo que afecta directamente al rendimiento de otros componentes que utilizan la RAM. La memoria dedicada de la GPU no sigue el mismo protocolo de funcionamiento. Debido a sus estrechas conexiones con los núcleos de procesamiento, la ejecución de tareas es muy rápida, algo que la memoria GPU compartida no puede igualar.
¿Se puede aumentar o disminuir la memoria GPU compartida?
La memoria GPU compartida no afecta directamente al rendimiento. En el caso de las GPU dedicadas, incluso si se asigna el máximo almacenamiento de RAM a la memoria GPU compartida, no afectará al rendimiento, a menos que la memoria dedicada esté completamente llena. Solo entonces, el sistema operativo permite el uso de la memoria compartida. En términos sencillos, la GPU dedicada no utiliza memoria compartida a menos que la memoria dedicada esté completamente llena. Incluso después de eso, si se utiliza la memoria compartida, no afectará al rendimiento, ya que el sistema reduce automáticamente las velocidades de fotogramas y mantiene la ejecución estable.
Los usuarios de GPU integradas a menudo intentan aumentar su almacenamiento dedicado o reservado configurando la configuración del BIOS y el editor del registro para obtener el mejor rendimiento. Pero en realidad, esto puede disminuir la relación de rendimiento, porque en las GPU integradas, el sistema reserva una cierta cantidad de espacio para la GPU. Cuando el usuario intenta aumentar el almacenamiento de memoria dedicado, se reduce el espacio en la RAM, degradando el rendimiento. Por ejemplo, si tu sistema tiene 6 GB de RAM y deseas aumentar el almacenamiento de la GPU dedicada en 2 GB, solo tendrás 4 GB de RAM disponibles. Incluso si el sistema está en modo inactivo y la GPU no está procesando ninguna tarea, la GPU reservará 2 GB de RAM. En tales casos, siempre se recomienda tener una memoria GPU compartida que solo sea accesible cuando sea necesario.
Ventajas y desventajas de la memoria GPU compartida
Ventajas:
- Gestión eficiente del rendimiento en casos excepcionales.
- No ocupa espacio físico , ya que es un tipo de almacenamiento virtual.
- Flexibilidad de uso : Puede utilizar hasta el 50% de la RAM según sea necesario.
Desventajas:
- Menor velocidad que la memoria GPU dedicada.
- Mayor complejidad de procesamiento debido a la conexión a través de PCIe.
- Posible impacto en el rendimiento general del sistema si se utiliza una gran parte de la RAM.
Consultas habituales
¿Cómo activar la memoria GPU compartida?
La activación de la memoria GPU compartida generalmente se realiza automáticamente por el sistema operativo según sea necesario. No hay una configuración específica para activarla o desactivarla manualmente en la mayoría de los casos. El sistema operativo gestiona la asignación de memoria de forma dinámica.
¿Cómo puedo optimizar el uso de la memoria GPU compartida?
Para optimizar el uso, asegúrate de tener suficiente memoria RAM dedicada para tu tarjeta gráfica. Si tienes una GPU integrada, considera actualizar tu RAM del sistema. Prioriza las aplicaciones y tareas que requieren un mayor rendimiento gráfico. Monitorea el uso de la RAM con herramientas del sistema para identificar posibles cuellos de botella.
¿Afectará negativamente al rendimiento de mi sistema usar la memoria GPU compartida?
El impacto en el rendimiento depende de varios factores, incluyendo la cantidad de RAM disponible, el tipo de GPU y las aplicaciones que estás utilizando. Si tienes suficiente RAM, el impacto suele ser mínimo. Sin embargo, si la RAM está limitada, usar una gran porción para la memoria GPU compartida puede afectar al rendimiento general del sistema. Es fundamental encontrar un equilibrio entre las necesidades de la GPU y las de otros procesos.
¿Qué pasa si mi tarjeta gráfica no tiene memoria dedicada?
Si tu tarjeta gráfica no tiene memoria dedicada, dependerá completamente de la memoria RAM del sistema. Esto puede limitar el rendimiento gráfico, especialmente en tareas intensivas. Considera actualizar tu sistema con una tarjeta gráfica con memoria dedicada para un mejor rendimiento.
Recuerda: La memoria GPU compartida es una herramienta útil, pero su uso debe considerarse cuidadosamente. Un buen equilibrio entre la memoria dedicada y la compartida asegura el mejor rendimiento general del sistema. Optimiza tu configuración para obtener los mejores resultados.