24/11/2015
La historia de la imprenta en México está intrínsecamente ligada a la evolución del colofón, una pequeña sección al final de los libros que ofrecía información crucial sobre su creación. Desde la llegada de los incunables hasta el siglo XVIII, el colofón fue testigo mudo de los cambios en las prácticas de impresión y la producción editorial en Nueva España, proporcionando datos invaluables para comprender la historia del libro mexicano.
El Colofón: Una Ventana al Pasado
El colofón, heredado de los libros manuscritos, ofrecía detalles esenciales como el nombre del impresor, el lugar y la fecha de impresión, y en ocasiones, un agradecimiento a Dios por la culminación de la obra. Si bien con la aparición de los incunables la portada comenzó a asumir parte de esta función, el colofón siguió siendo relevante, especialmente en aquellos incunables que carecían de portada.
Los bibliógrafos coinciden en la importancia del colofón para la identificación de obras antiguas. Era la firma del impresor, la prueba fehaciente de su autoría en el proceso de creación del libro. Su estudio permite rastrear la actividad de los talleres de impresión y reconstruir la cadena de producción editorial de épocas pasadas. Para los investigadores, el colofón es una fuente primaria fundamental.
El Colofón en Europa y su Llegada a México
En Europa, el colofón se remonta al siglo XV. Geldner, en su Manual de Incunables, cita un libro de salmos de 1451 como uno de los primeros ejemplos. Estos primeros colofones, con frecuencia en latín, ofrecían una información concisa pero fundamental para la comprensión de la obra. La llegada del colofón a México se produjo junto con la imprenta, en 153Este evento marcó un hito en la historia cultural de la Nueva España.
El Primer Libro Impreso en México
Gracias a su colofón, conocemos el primer libro impreso en México y en América: el Manual de adultos(1540), conservado en la Biblioteca Nacional de España. El colofón de esta obra histórica revela detalles como el lugar de impresión ("la gran ciudad de México"), el comitente (los Reverendísimos Señores Obispos de la Nueva España), la imprenta ("casa de Juan Cromberger"), y la fecha exacta de impresión.
La Evolución del Colofón en la Nueva España (Siglo XVI)
Durante el siglo XVI, los impresores novohispanos no se limitaron a imprimir textos; buscaban la belleza y el arte en sus creaciones. Los colofones de esta época, a diferencia de los concisos ejemplos europeos, muestran una mayor ornamentación, acompañados en ocasiones de la marca del impresor o algún adorno. Algunos colofones adoptaban formas triangulares o incorporaban viñetas que añadían un toque estético al texto.
Es importante mencionar que no siempre la fecha en la portada coincidía con la del colofón. Este fenómeno ilustra la complejidad de la producción editorial del siglo XVI. Un ejemplo de esta discrepancia se observa en el Confesionario mayor, donde la portada indica 1569 mientras que el colofón señala 156Estas diferencias, aparentemente menores, nos aportan valiosa información sobre la gestión del tiempo y la organización de las imprentas coloniales.
Siglos XVII y XVIII: El Declive del Colofón
A partir de los siglos XVII y XVIII, la presencia del colofón en los impresos mexicanos comienza a disminuir. La información que antes proporcionaba el colofón comienza a aparecer en la portada, haciendo que la inclusión de esta sección final se vuelva redundante. En esta etapa, los impresos concluyen con fórmulas como "Fin", "Laus Deo", "Finis", "Amén", a menudo acompañadas de una viñeta decorativa.
En el siglo XVIII, la información sobre el tiraje o número de ejemplares impresos es prácticamente inexistente en los colofones. La escasez de colofones en esta época refleja el cambio en las prácticas editoriales. Si bien la información de la portada se volvió más completa, la pérdida del colofón representa una pérdida de información contextual significativa para los estudiosos.
Impresores Destacados de la Nueva España
El siglo XVIII en México vio el trabajo de cerca de 40 impresores, muchos descendientes de familias con larga tradición en el oficio. Elsa Cortés destaca la presencia de los Herederos de la viuda de Francisco Rodríguez Lupercio, los Herederos de Guillena Carrascosa, y los Herederos de María de Ribera, entre otros. La modernización de la tipografía novohispana estuvo a cargo de José Bernardo de Hogal, cuyo trabajo fue continuado por su viuda. Felipe de Zúñiga y Ontiveros, un destacado impresor, matemático, astrónomo y agrimensor, publicó obras como la Tutorial de Forasterosy los Estatutos de la Real Academia de San Carlos.
Este siglo también vio la aparición de la primera imprenta institucional, la del Colegio de San Ildefonso (jesuitas), y la Imprenta de la Biblioteca Mexicana, adquirida por Juan José Eguiara y Eguren para imprimir su Bibliotheca Mexicana, la primera bibliografía impresa en América. Estos ejemplos muestran la diversificación y el crecimiento del sector editorial en la Nueva España, impulsado por diferentes instituciones y actores.
La Importancia de la Imprenta Antigua y su Legado
El estudio de la imprenta antigua en México, a través de sus colofones y otras fuentes, es fundamental para comprender la evolución del libro y la cultura escrita en la Nueva España. La información contenida en estos pequeños fragmentos de texto nos permite reconstruir la historia de los talleres de impresión, identificar a los impresores y sus prácticas, y analizar la evolución de las prácticas editoriales a lo largo de los siglos. La Casa de las Minas, como un ejemplo de imprenta colonial, representa un legado tangible de esta rica historia. La investigación de la historia de la imprenta nos permite apreciar la artesanía y la dedicación de aquellos que construyeron las bases de la cultura escrita en México.
Palabras clave: Imprenta antigua, colofón, historia del libro, México, Nueva España, incunables, impresores, Juan Cromberger, Antonio de Espinosa, siglo XVI, siglo XVII, siglo XVIII, bibliografía, tipografía, Casa de las Minas.
Siglo | Características del Colofón | Impresores Destacados |
---|---|---|
XVI | Ornamentado, a veces con viñetas. Fecha puede no coincidir con la portada. | Juan Cromberger, Antonio de Espinosa |
XVII | Menos frecuente. Fórmulas como "Fin", "Laus Deo". | (Menos información disponible en las fuentes) |
XVIII | Poco frecuente. Información en la portada. | Herederos de la viuda de Francisco Rodríguez Lupercio, José Bernardo de Hogal, Felipe de Zúñiga y Ontiveros. |