Imprenta charcas : historia de la impresión en costa rica y guatemala

18/10/2014

Valoración: 4.93 (6093 votos)

Este artículo explora la rica historia de la imprenta en Costa Rica y Guatemala, desde sus inicios hasta la consolidación de la industria editorial. Analizaremos el impacto de la imprenta en la cultura, la educación y la economía de ambas naciones, destacando el papel de figuras clave y las transformaciones que experimentaron los modelos de publicación.

imprenta charcas - Quién trajo la imprenta a Costa Rica

Índice
  1. Imprenta Charcas en Costa Rica: De la Imprenta a las Editoriales
    1. Consolidación de las Editoriales en Costa Rica (1950-1979)
    2. Las Editoriales y la Crisis de 1980
  2. Imprenta Charcas en Guatemala: Los Pioneros de la Impresión

Imprenta Charcas en Costa Rica: De la Imprenta a las Editoriales

En Costa Rica, el desarrollo de la industria editorial estuvo estrechamente ligado a la evolución de la imprenta. Si bien la llegada de la imprenta a Costa Rica no se detalla explícitamente en este texto, el análisis se enfoca en la transición de un sistema de publicación basado en imprentas individuales hacia un sistema organizado alrededor de editoriales. Este cambio significativo se dio entre 1906 y 1919, gracias al impulso de figuras como Joaquín García Monge y los inmigrantes catalanes Ricardo Falcó y Andrés Borrasé.

La etapa inicial (1906-1919) vio el surgimiento de las primeras iniciativas editoriales. Luego, entre 1920 y 1949, se fundaron las primeras editoriales públicas y privadas. Sin embargo, fue en el período 1950-1979 cuando la industria editorial se consolidó, impulsada por la expansión del Estado y del sistema educativo. A pesar de la crisis económica de 1980, el auge editorial continuó, fortalecido por el desarrollo de la investigación y los estudios de posgrado en las universidades.

Consolidación de las Editoriales en Costa Rica (1950-1979)

El crecimiento económico de Costa Rica tras la guerra civil de 1948, liderado por el Partido Liberación Nacional (PLN), trajo consigo una expansión del Estado, la industrialización por sustitución de importaciones y una mejor distribución del ingreso. La expansión de la clase media y la reducción de la pobreza impulsaron una mayor demanda de libros. La inversión en educación elevó la cobertura en la enseñanza primaria, secundaria y universitaria, creando un mercado cultural en expansión.

La fundación de nuevas universidades públicas (ITCR, UNA, UNED) y privadas (UACA) diversificó aún más los círculos intelectuales y la demanda de publicaciones. El Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes (MCJD), creado en 1971, también contribuyó a este proceso. La Tabla 2 muestra el incremento en el número de editoriales, tanto públicas como privadas, durante este periodo. La Editorial Costa Rica (ECR) se convirtió en la principal editorial pública, aunque su crecimiento moderado se vio afectado por problemas de gestión de inventarios.

Período Editorial Institucional Institución Editora Subtotal Entidad Internacional Total General
1950-1954 1 5 9 10 5

La Tabla 2 muestra datos incompletos, pero ilustra el aumento significativo de las editoriales. La ECR respondió a los desafíos estableciendo alianzas con el Ministerio de Educación Pública (MEP) y la Universidad de Costa Rica (UCR) para que sus publicaciones fueran de lectura obligatoria para estudiantes.

En este período, las editoriales privadas se especializaron en diversos campos: literatura, estudios académicos, libros de texto y obras religiosas. La mayoría de estas editoriales publicaron pocos títulos y tuvieron una existencia efímera.

Las Editoriales y la Crisis de 1980

La crisis económica de 1980 trajo consigo un incremento en la pobreza y el desempleo, afectando el sistema educativo y la industria editorial. La asistencia a la escuela secundaria y universitaria disminuyó. Sin embargo, paradójicamente, la creación de editoriales privadas se intensificó. La Tabla 3 muestra este fenómeno.

Período Editorial Institucional Institución Editora Subtotal Entidad Internacional Total General
1980-1984 26 2 1 6 10

(Tabla 3 muestra datos incompletos, pero ilustra el aumento de editoriales a pesar de la crisis). La crisis de la ECR abrió espacio para que las editoriales universitarias públicas y las editoriales privadas especializadas en textos académicos crecieran.

El auge de editoriales privadas que publicaban estudios académicos fue impulsado por el debate político sobre el desarrollo económico, la reactivación de la Guerra Fría en Centroamérica y el crecimiento de la investigación universitaria y los programas de posgrado. La competencia del fotocopiado también representó un desafío.

Imprenta Charcas en Guatemala: Los Pioneros de la Impresión

Guatemala fue la cuarta ciudad del Nuevo Mundo en tener imprenta, precedida por México, Lima y Puebla de los Ángeles. Este logro, que marcó un hito en la vida cultural guatemalteca, se debió a circunstancias accidentales, como la necesidad del obispo fray Payo de Ribera de imprimir su obra en su diócesis. Antes de la llegada de la imprenta en 1660, se menciona un ensayo tipográfico en 1641, “El Puntero”, de un autor franciscano, que fabricó sus propios caracteres y prensa.

Fray Francisco Ximénez menciona que la imprenta llegó a Guatemala “poco antes del año de 1660, por el mes de julio”. Otras fuentes, como fray Diego Sáenz Ovecuri, confirman la llegada de la imprenta en 1660, gracias a la iniciativa del obispo fray Payo de Ribera, quien comisionó a fray Francisco de Borja para contratar a un impresor en México.

José de Pineda Ibarra fue el primer impresor en Guatemala, llegando en 1660 con su familia, prensa y material tipográfico. Obtuvo un privilegio exclusivo para imprimir doctrinas cristianas y catecismos. Sus obras más importantes fueron la “Explocatio apologetica” del obispo Ribera y “La Thomasiada” de Sáenz Ovecuri. Además de impresor, Pineda Ibarra también era librero y encuadernador.

Tras la muerte de José de Pineda Ibarra, su hijo Antonio continuó con el negocio familiar. Otros impresores importantes en Guatemala fueron Antonio de Velasco, Sebastián de Arévalo, Manuel José de Quirós, Ignacio Jacobo de Beteta, Cristóbal de Hincapié Meléndez, Joaquín de Arévalo, Antonio Sánchez Cubillas, Juana Martínez Batres, Ignacio Beteta y Alejo Mariano Bracamonte. Cada uno contribuyó a la historia de la impresión guatemalteca, dejando un legado de publicaciones y técnicas tipográficas diversas. La información incluye detalles sobre sus vidas, obras y contribuciones al desarrollo de la industria tipográfica en Guatemala.

La información detalla las distintas imprentas que operaron en Guatemala, sus propietarios, las fechas de funcionamiento, las publicaciones más destacadas y los desafíos que enfrentaron, incluyendo los terremotos y la competencia. También incluye información sobre los grabadores que trabajaron en Guatemala, sus técnicas y obras más significativas.

Imprenta Charcas, aunque no mencionado explícitamente en los textos, se entiende como una referencia genérica a la industria de la impresión en la época colonial. El análisis de la evolución de la imprenta en Costa Rica y Guatemala resalta la importancia de este arte en el desarrollo cultural y social de ambas naciones, mostrando una evolución desde imprentas individuales hasta la industria editorial moderna.

Subir