26/01/2023
La letra imprenta itálica, también conocida como cursiva o bastardilla, es un estilo tipográfico que se caracteriza por sus caracteres inclinados. A diferencia de la escritura cursiva manuscrita, la itálica de imprenta tiene una forma más formal y estructurada, diseñada para su reproducción en textos impresos. Este artículo profundiza en la historia, el uso y las diferentes denominaciones de este estilo tipográfico tan versátil.
Historia de la Letra Imprenta Itálica
La letra imprenta itálica tiene sus orígenes en el siglo XVI, en la Italia renacentista. Fue creada por el impresor veneciano Francesco Griffo, comisionado por Aldo Manuzio alrededor de 1500 o 150La necesidad de producir libros en formatos más compactos, específicamente para poesía, impulsó la creación de este estilo. La itálica permitía ahorrar espacio sin sacrificar la legibilidad, a la vez que evocaba la estética de la escritura manuscrita.
Griffo se inspiró en la letra bastarda, una escritura romana inclinada utilizada por los notarios florentinos del círculo humanista de Niccolò Niccoli. Durante el siglo XVI, la letra cursiva de imprenta tuvo un uso extendido, aunque con el tiempo fue perdiendo terreno frente a la letra redonda, empleándose más como complemento para notas marginales o efectos decorativos.
A partir del siglo XVII, los fabricantes de tipos de letra incluían invariablemente la cursiva junto con los tipos de letra redonda. En el período barroco, la letra bastarda se desarrolló como una escritura manuscrita que se diferenciaba de la tipografía precedente. Destacados calígrafos como Pedro Díaz Morante, Juan Claudio Aznar de Polanco y Francisco Javier de Santiago Palomares contribuyeron a su refinamiento. Torcuato Torío elevó la escritura y la enseñanza de la bastarda española a su apogeo, antes de que la letra pseudoinglesa la desplazase definitivamente.
Bastardilla o Cursiva: La Nomenclatura
La Real Academia Española (RAE) prefiere el término «cursiva» a «bastardilla». Si bien su Diccionario de la lengua españolaredirige la entrada «Cursiva» a «Bastardilla», en otros contextos utiliza consistentemente «cursiva». Esta preferencia se refleja en sus publicaciones, donde se utiliza el término « letra cursiva » para referirse a la letra imprenta itálica. Ambos términos, sin embargo, son válidos y se usan indistintamente en muchos contextos.
Usos de la Letra Imprenta Itálica
La letra imprenta itálica, o cursiva, tiene diversos usos en la escritura y la edición. Su aplicación varía según las convenciones estilísticas y el contexto. Algunas aplicaciones comunes incluyen:
- Títulos de obras: Libros, revistas, artículos, películas, etc. En este caso, suelen usarse mayúsculas y minúsculas.
- Énfasis: Para resaltar palabras o frases dentro de un texto.
- Nombres científicos: Géneros y especies de plantas y animales.
- Idiomas extranjeros: Palabras o frases en un idioma diferente al del texto principal, aunque las convenciones pueden variar.
- Notas al pie: A menudo se usan para indicar aclaraciones o referencias.
- Pensamientos: En narrativa, para indicar los pensamientos de un personaje.
- Términos técnicos: Para destacar términos específicos dentro de un campo de conocimiento.
Tipos de Cursiva
Es importante distinguir entre los diferentes tipos de cursiva :
- Oblicua: Simple inclinación de la letra romana , sin modificaciones sustanciales en el diseño del carácter.
- Itálica: Un diseño más caligráfico, con trazos interrumpidos que imitan la escritura a mano.
- Manuscrita: La forma más caligráfica, con un trazo continuo similar a la escritura cursiva a mano.
La letra imprenta itálica que se usa habitualmente en la imprenta y la edición digital suele corresponder a la versión itálica, con un diseño más elegante y estilizado que la oblicua.
Consideraciones Ortotipográficas
El uso de la cursiva está sujeto a normas ortotipográficas. Existen discrepancias y matices, pero algunas convenciones generales incluyen:
- Mayúsculas y minúsculas: El uso de mayúsculas o minúsculas en la cursiva depende del contexto. Los títulos de obras suelen llevar mayúsculas, mientras que el énfasis en palabras individuales puede usar minúsculas.
- Combinación con negritas: La combinación de cursiva y negritas es posible, aunque se debe usar con moderación para evitar sobrecargar el texto.
- Consistencia: Es fundamental mantener la coherencia en el uso de la cursiva en todo el documento. Una aplicación inconsistente puede resultar confusa para el lector.
La Letra Imprenta Itálica en la Era Digital
En la era digital, la letra imprenta itálica sigue siendo relevante en la edición de documentos, sitios web y otras plataformas digitales. Los programas de procesamiento de texto y los editores web ofrecen herramientas para aplicar el estilo itálico fácilmente. El uso adecuado de la cursiva contribuye a la claridad, la estética y la legibilidad del texto digital.
La letra imprenta itálica, con sus diversas denominaciones (cursiva, bastardilla), es un recurso tipográfico con una larga historia y un uso versátil en la escritura y la edición. Entender sus orígenes, sus tipos y sus convenciones ortotipográficas permite aprovechar al máximo su potencial para mejorar la comunicación escrita.
Tabla Comparativa de Tipos de Letra Cursiva
| Tipo de Cursiva | Características | Ejemplo |
|---|---|---|
| Oblicua | Inclinación simple de la letra romana. | Texto en oblicua |
| Itálica | Diseño caligráfico con trazos interrumpidos. | Texto en itálica |
| Manuscrita | Trazo continuo, similar a la escritura a mano. | Texto en manuscrita |
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